"M VIDA APESTA"
lo k pasa esk siento k mi vida es un asko
MI VIDA ES UNA SIMPLE
PoRKERIA ..!
SolO lO k se es llorar
sOn muchas las razOnes k
sOy infeliz ...!!
Estoy igual, no tengo
amigos me siento solo en la vida
Estoy totalmente destruida me quiero morir, soy fea y
gorda nadie me quiere y me valora
La VERDAD ME QUIERO
MORIR NO SE PARA QUE EXISTI SI SOY INFELIZ
Mi vida apesta!!
… La mía apesta más
Sé que tengo todo para
ser feliz y la verdad no lo soy
Nunca he sido muy bueno
en los estudios
Aun ni siquiera lo he
hecho L
A mi edad es divertirse
y tener muchas novias y sabe que... el caso es que no puedo
La verdad soy un looser
Últimamente me siento
muy cansado, desanimado, sin motivación o inspiración.
Me siento mediocre,
estúpido, infantil y patético
Me siento decepcionado
de mí mismo
No soy lo que debería
ser.
Nada parece ir bien con mi vida
Soy un fracaso en
el amor
Estoy completamente
solo, hasta en Facebook soy un don nadie
Odio mi vida, la odio
soy una forever alone, no sé porque existí
Uno de los misterios más grandes de la vida es
por qué a algunas personas parece
siempre sonreírles, mientras que con otras parece ensañarse.
Los motivos para sentirse decepcionados de la vida son muy variados y están matizados
por múltiples factores. Mientras que para una persona podría ser el no sentirse
correspondida sentimentalmente, para otra, el ser diagnosticada de una enfermedad
crónica y para otra más, perder a un ser querido. Sea cual fuera la razón, te
damos algunas opciones para manejar esta decepción y ayudarte a salir adelante.
1.- Analiza tu Situación. ¿Qué está causando
el dolor que sientes?
Cuando estamos dentro de un túnel es difícil
ver la salida. Pero en este punto, debes tratar de ver las cosas “desde arriba”
pues esto te permitirá salir de esta situación o encontrar los medios adecuados
para lograrlo.
·
Si es Afectivo. Puede ser un episodio pasajero
disparado por un evento aislado.
Mi
recomendación: No dramatices. Enfréntate a la vida, siempre hay un motivo para
seguir adelante. Encuéntralo.
Siempre hay
una salida por más que parezca que todo está contra nosotros.
o Problemas familiares. La gran mayoría
tienen solución. Muchos de ellos se resuelven hablando en familia o cambiando
nuestra actitud.
o Decepciones amorosas. No te esfuerces
demasiado en agradar a quien no agradas, de amar a quien no te ama y de sonreír
a quien no quiere sonreírte. Date tu valor, respétate y fíjate bien con quien
te relacionas para evitar esto.
o Falta de amistades. Hoy día quien no
tiene amistades es porque no quiere tenerlas. Si no las tienes, tal vez
tendrías que analizar tu conducta. Muéstrate siempre natural con las personas,
sonríe y no fuerces las cosas, que éstas solas se darán.
·
Si es Emocional. Si la causa de tu malestar es mental,
también puede deberse a un episodio pasajero, que desaparecerá en cuanto
desaparezca lo que lo ocasiona. Sin embargo, si presenta persistencia o no
tiene explicación evidente, lo más recomendable es acudir con un especialista,
pues puede deberse a un estado depresivo.
Los problemas
de salud emocional son causados por cambios en las sustancias químicas del cerebro
y no están relacionados con un defecto de la personalidad. Tampoco es algo de
lo que debieras avergonzarte ya que son problemas muy comunes en hombres y
mujeres de todas las edades. Su frecuencia e intensidad son variables, pudiendo
durar mucho tiempo o bien, desaparecer.
Muchas
personas tienen la falsa creencia que lo que sienten es melancolía, una baja de
energía o tristeza pasajera y que se recuperarán por sí solas. La Depresión es una
enfermedad clínica que afecta su manera de sentir, pensar y actuar. Pero la
buena noticia es que el tratamiento funciona bien para la mayoría de las personas.
Una persona
podría estar deprimida si:
o Se siente triste o sin esperanzas, llora,
se enfada fácilmente o tiene mal humor.
o Preferiría no haber nacido.
o Sube o baja mucho de peso.
o Tiene dificultades para dormir o duerme
demasiado.
o Se siente inquieto o ansioso.
o Se siente cansado todo el tiempo.
o Se siente víctima, inútil o
despreciado.
o Le cuesta concentrarse, se le olvidan
las cosas con facilidad.
o Muestra aislamiento, retraimiento o
inhibición.
o Piensa con frecuencia en la muerte o en
el suicidio.
·
Si es externo. Entiéndase por factor externo todo
aquello que no depende de nosotros y que nos afecta adversamente. En ocasiones
estos problemas pueden resolverse pero en caso contrario, debemos siempre
tratar de manejar la situación y no dejar que ésta nos maneje. Debemos mantener
un enfoque positivo ante las adversidades y aunque no es fácil, por supuesto,
tratar de utilizarlas para nuestro crecimiento.
2. Ten un pensamiento positivo.
Si hay algo
en lo que puedes estar seguro, es que en la vida vas a tener muchas
dificultades y que no podrás solucionarlas tratando de evadirte ni pensando en
suicidarte. Tienes que aprender a enfrentarlas y a ser fuerte para seguir
adelante. Tienes que tener presente que ahora estás pasando por un momento
difícil, es todo y que pronto vendrán tiempos mejores.
·
No te rindas. No debes dejar que las adversidades
te avasallen, si tienes que sufrir, hazlo, pero no te rindas. No te des por
vencido aun cuando resulte muy tentador. A veces, ayuda mirar un poco a tu
alrededor y ver que hay personas verdaderamente desgraciadas que tienen una
gran actitud.
·
Apártate de la gente que te hace daño o que
te no te aporte nada positivo. Recuerda, ningún problema se solucionó por
consumir drogas o alcohol. Evadirse no es nunca una salida.
·
No te compares, ni permitas que te comparen con
alguien. Cada persona es única y no edifica en nada compararse con los demás,
especialmente en el mundo de redes sociales, donde vemos los “logros” y
“éxitos” de los demás. No te compares, pues muchas veces detrás de ese aparente
éxito hay mentira y presunción.
·
Deja
atrás fracasos pasados.
Si te equivocaste, rompe ataduras con el pasado. Si piensas que no mereces ser
feliz, seguramente lo lograrás y te amargarás la vida y se la amargarás a las
personas que vivan a tu alrededor. Sentirse merecedor de cosas buenas en la
vida, entre ellas la felicidad, es requisito para obtenerlas.
3. Mejora tu actitud
•
Haz ejercicio. Si el motivo de tu infelicidad
tiene que ver con tu físico es un buen momento para ejercitarlo. Además
mejorará tu estado anímico.
•
Busca y practica una actividad
que disfrutes, de preferencia que te relacione con otras personas.
•
Considera unirte
a un grupo de ayuda, de estudio, de oración, o altruista.
•
No te ocultes, especialmente de tus amigos y
familia. En lo más oscuro de tu noche pueden darte apoyo emocional y moral.
•
Evita discusiones y conflictos. Esto solo podría empeorar tu
situación.
•
No abandones tus obligaciones. Ya sea que estudies o trabajes, no
renuncies y ten la madurez de cumplir con tus responsabilidades.
4. Si el dolor es insoportable.
Si la idea
del suicidio ya no te resulta tan extrema, DEBES pedir ayuda y cuanto antes lo
hagas, mejor.
•
Muchas
personas reconocen haber tenido pensamientos suicidas en algún momento de su
vida, aunque en realidad era una ilusión para evadirse de alguna terrible
adversidad. Si estás comenzando a tener esos pensamientos, habla con tu médico
o tu terapeuta. Reconocer que tienes un problema, es reconocer que necesitas
una solución. Ellos podrían ayudarte a volver a tu centro emocional.
•
Si
tu situación es más complicada. Si no has perdonado o no quieres perdonar. Si
te sientes tan poca cosa que piensas que nadie notará tu muerte. Si quieres dar
a alguien una lección… solamente vas a dejar un caos detrás de ti. En todo
caso, este texto no va a solucionar algo ni hacerte cambiar de opinión.
Luego de
haber leído muchos testimonios de suicidas potenciales, noté que un porcentaje
significativo de ellos habían abandonado esas ideas y había recuperado su
equilibrio emocional. ¿Cómo? Se acercaron a Dios y obtuvieron la fortaleza para
seguir adelante.
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